3 Jun 2009

PS09' (Día II)

Comencé la jornada del viernes con los Spiritualized, un grupo que hace años tenía su áquel, pero que con el tiempo su propuesta inicial se han ido diluyendo hasta convertirse en música de ascensor. Inexplicablemente a la mayoría del público parecía enstusiasmarles(?).

A mí me hicieron más gracia The Pains of Being Pure at Heart, un grupo de pop energético con unas voces muy a lo morrisey, que a pesar de haber publicado únicamente un EP demostraron tener muchas tablas a la hora de defender su música en directo.
De aquí me fuí a ver un rato a los Art Brut, un grupo de post-punk de guitarras afiladas, con vocalista carismático al frente. El concierto estuvo bien, pero se echan a faltar en su repertorio un par de hits que enganchen al público. En cuanto los tengan serán un grupo de primera fila, seguro.Como había llegado la hora del ruido por el ruido(los Sun 0))) y otra vez los pesaos de My bloody Valentine) decidí que era mejor hacer un alto para reponer fuerzas porque aún quedaban muchas horas por delante.

Una vez comido y bebido me acerqué a ver a los Throwing Muses, un grupo cuya cantante parece no haberse enterado aún de que Kurt Cobain ha muerto. Claro que si aguantan unos pocos años más haciendo lo mismo probablemente engancharán el revival de los 90' y se convertirán en clásicos. Resistir es vencer, dicen.

Como me apetecía volver al siglo XXI me fuí a ver a The Mae Shi, un grupo en la línea dance-punk de los LCD Soundsystem que en cuestión de minutos montaron la pajarraca del festival. Eesulta dificil saber cuantos miembros tiene el grupo porque estaban contínuamente entrando y saliendo del escenario, cambiando de instrumentos, lanzándose al público... Un directo divertidos como pocos.
Despues de semejante subidón ver a Jarvis Cocker fue un bajonazo de la hostia. Si ya de por sí no es que sea uno de mis músicos favoritos, el contraste con los angelinos le hacían soporífero. Un consejo Jarvis: Dúchate, córtate el pelo y reúne a los Pulp. Será lo mejor para todos.

Hasta por pasar el rato me fuí a ver que hacían los Fucked Up. Al llegar me encontré un escenario en el que había más fotógrafos que músicos. El motivo: el cantante gorderas había bajado en pelotas a cantar en medio del público. ¡Puajjj!!! ¿Era necesario? El tipo se debíó enterar de la que montó el vocalista de Les Savy Fav el año pasado y deció que él no iba a ser menos. En fin...

Despues tocaban los Shellac, un grupo de hardcore sobrevalorado hasta decir basta simplemente porque su guitarrista ha produido de alguno de los mejores discos de rock de los 90'. Claro que una cosa es producir a grandes músicos, y otra cosa muy distinta es ser capaz de hacer buena música. Aunque ésto es algo que no parece preocupar demasiado a sus fans, que disfrutaron como gorrinos en un charco.

Salí de aquella catarsis de cuerpos sudoros y me acerqué a ver a ver si los Bloc Party habían mejorado su directo desde la última vez que les ví. Pues no, siguen fallando más que una escopeta de feria. ¡Qué manera de destrozar un buen repertorio! El día que vuelvan por aquí que me hagan una perdida y si acaso ya pasaría.Mi último cartucho de la noche fueron los A Certain Ratio, un grupo de jazz-funk de Manchester al que le sobra música pero al que le falta alma. Todo lo que tienen de virtuosos lo tienen de aburridos. Me comí media hora de rasgados de guitarra y slaps de bajo, apuré la cerveza y dí por finalizado el segundo día de festival, que no tenía yo el cuerpo ya para más alegrías.
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